Este blog ha sido creado para darle un vistazo al México de hoy, un México diferente y que sin duda alguna ha tenido un cambio drástico, el nuevo siglo nos ha encaminado a rumbos distintos, donde podemos apreciar diferentes ángulos y puntos de vista de la realidad.
No es placer lo que busco entre tus brazos sino un sentimiento noble no es sexo lo que quiero de ti tan solo un poco de amor para vivir No busco más de lo que me puedas dar sólo amor, de ese que desbordas hasta por los ojos un poquito de ese dulce sentimiento No es una tarde de pasión lo que espero corazón es un momento de magia y amor lo que yo quiero No espero sólo un momento amor, quiero que comprendas que es una eternidad lo que pretendo Solo quiero tu amor, sólo quiero quererte como mereces solo quiero adorarte Vida mía de ti espero el amor verdadero, perderme en tus sentimientos disfrutar todos tus pensamientos No espero más de lo que me puedes dar sólo un poco de amor o mucho, en la medida que me lo puedas regalar Amor mio, amor simplemente amor es lo que yo pido.
Este lunes, fui al centro a buscar una libreta estilo francesa que me había costado trabajo encontrar. No contaba con el mitin de Josefina...yo no acudo a ningún mitin de ningún partido desde que en 2007 o 2008 fui a uno de Obrador en mi tierra, que es veinte veces más pequeña que Mérida.
Lo que encontré fue una combinación de acarreados y gente que desbordó el sistema de transporte de la capital del sureste. En el camión, repleto de gente, me preguntaba ¿que espera esta gente de Josefina, o de cualquier candidato?. Digo, los que iban en el camión no eran acarreados, iban por convicción propia, había niños, ancianos, parejas, jóvenes. El centro estaba abarrotado de gente traída de los municipios, banderas (que casi me sacan un ojo) y cartelones, en general basura electoral. El sonido era estridente y expulsaba a cualquier civil de la plaza grande, que se convirtió en un hormiguero de gente caminando en círculos que ni sabían exactamente que hacían ahí. Decidí quedarme como un ejercicio de observación.
Sobre el escenario, un animador hacía chistes y gritaba a la multitud, la incitaba a corear los nombres de los candidatos del PAN. Aquello me recordó tanto a un evento de Televisa, ¿dónde estaban las propuestas?, comencé a preguntar, nadie supo responderme. Un contingente de jóvenes entraban por la 63 y la 60, agitaban banderas y coreaban "Huacho" o "Josefina". No pude evitar pensar en la primera marcha de #YoSoy132 , en los gritos de los otros estudiantes en las calles de Mérida. Ahora lo estridente eran los megáfonos, puesto que la gente apenas alcanzaba a montarse en la euforia que despedían las bocinas en las esquinas de la plaza, y luego, se callaban sin más. Debo admitir que me dolió mucho aquella visión, que no sólo ocurre con el PAN sino con cada uno de los grandes partidos de México, la democracia partidista aseguró en el pasado la continuidad de la Revolución Mexicana por la vía pacífica, luego la traicionó y finalmente la ahogó, los partidos nos evitaron un siglo de revueltas, pero ¿a qué costo?. Por otro lado, con una educación opuesta a la democracia real y al sentido de la comunidad, es imposible concebir una democracia sin partidos, que no acabe en un aparatoso fracaso.
Me quedé hasta que apareció Josefina y su equipo, como siempre, la señora soltó su discurso monótono y que desde mi perspectiva es escuchar spots en vivo. Las llamadas feministas, como si al polarizarnos al feminismo eliminaramos al machismo, y su orgullo de ser mujer. A mi me parece fenomenal que México haya tenido a un partido pesado lanzando a una mujer por la presidencia de la República, pero Josefina, en lugar de marcar historia como la primera mujer que lograba romper ese círculo, se la ha pasado haciendo un circo, que ha acabado por molestar hasta a los propios panistas.
Me retiré del zócalo de Mérida, en un camión que encontré vacío por fortuna, y eso me permitió ver varios de los camiones que estaban apostados en las calles aledañas al centro, y en distintos lugares, para que no fuera tan obvio que habían acarreados.
Me quedaron muchas preguntas en el aire, ¿que piensan los jóvenes que se unen a "Juventud en Acción"?, ¿como combatir esta mitificación del líder?, ¿Cómo evitar la democracia que deidifica a los candidatos?, ¿Que nos pasa México?. Quiero hacer hincapié, en que esto no sólo ha sucedido en mitines de Josefina, al menos en Yucatán, pero es el caso que he vivido más de cerca y desde el cuál quería compartir mi experiencia, mi sentir como ciudadano, como votante que ya no cree en los partidos pero que asume su responsabilidad con el país.
El partido, no representa los intereses de la sociedad, no construye, sino destruye, polariza, y sin embargo parece que es nuestra única opción segura por ahora, sin embargo eso no implica que debamos permitirles sus excesos. No puedo evitar recordar el sentir de Octavio Paz cuando mencionaba que el PRI permitió eliminar la dictadura de la persona, aunque instauró una nueva forma, asfixiando la democracia. Así nos pasa ahora, estamos montados por tres partidos que fingen demencia o han olvidado todo, algunos caen en el cinismo. ¿Hasta cuando mantendremos esta partidocracia?.
POSTDATA. Lo que se expresa en estas líneas es sólo un sentir personal, y nada más, seguramente a muchos de los que me conocen se preguntan: ¿Tú en un mitin del PAN?. La respuesta está dada en parte arriba, y en parte a una persona en especial que amenizó mi estancia en ese momento. Gracias a ella puedo entregar este "Análisis" aunque más bien es una divagación. Vaya una vez más mis disculpas a los lectores del blog, que no tienen ganas de leer cosas políticas en el mismo, trataré de contenerme.
Renací en tu mirada, me estremecí en un beso cálido en un alba fresca pero escalofriante; se me olvidó el espacio y el tiempo se fue desmoronando paulatinamente entre palabras y frases absurdas. Ya para aquellos días mi alma albergaba un sentimiento, de esos que te ponen la piel de gallina, y te hacen hasta ver estrellitas; esa tarde al ver tus ojos entendí que los mios me pedían gritos los dejara verse en ellos, entendí que mis labios suplicaban hallarse mezclando su sabor con el néctar de los tuyos, una ráfaga de aire golpeo mi cara me incitó a besarte.
El beso no fue menos, por ello me tomaré la dedicación que merece para explicar detalle a detalle, movimiento a movimiento; ese ambiente era propicio para hablar de amores, para no dejar huir las emociones, sin embargo entre juegos y risas que en vez de hacernos parecer jóvenes adultos nos retornaban a nuestra etapa de adolescentes, nos miramos de repente y en un segundo más nuestras mentes se cruzaron, roce a roce en un instante soñador, tus labios sobre los míos, en un beso desenfrenado, no quería perderme de ti, no quería que aquel beso terminara jamás, un poco de ti, la humedad de tus labios, lo resbalosa que es tu lengua, todo esas sensaciones que erotizaban mi mente, me hacían querer seguir ahí, no movía ni una sola parte de mi cuerpo, más que lo necesario para un beso enloquecedor, en un instante más tus manos se resbalaron hasta mi cintura y volvieron a regresar a la posición en que mi rostro quedaba entre tus manos; ¿qué si nos vieron? que me puede importar si estaba pérdida entre tus labios, camino a tu corazón, entre las calles: no te vallas de mi lado y quédate en mis brazos amor; nos detuvimos, un poco de miedo llego a mis pensamientos y aun recuerdo como si me la volvieras a susurrar: "No pienses" fue la frase que alcanzaste a expresar, antes de perderme de nuevo en ti, en tus labios, en tu ser. No sabía que aquel beso sería el inicio de una gran travesía.
Ahora estoy aquí locamente perdida, entre tu amor y tu corazón, entre todo ese mundo de emociones que proporciona una caricia tuya, que me expresa un beso en la frente, un te amo entre la gente; hoy estoy aquí esperando el día en el que no tenga que esperar largas horas para verte, el día en que amanezca junto a ti, despertarte con un beso enamorado al tiempo en que recorro con mis manos tu rostro.
Fue en ti que renací, fue en ti que volví a creer en el amor, fue en ti que me perdí aunque no puedo evitar decir que fue de ti que me enamoré cuando te vi mirándote en mi mirar perdida, renací en tus palabras, en tu ser, amor mio, renací en ti.
Como una playa que se va extendiendo mansamente, como un oleaje quedo y continuo, ritmo, forma, sustancia, la unión de distintas sensaciones, armonía, armonía es la palabra. Un sol benévolo y terrible, una humedad que estruja los cuerpos vestidos y las almas desnudas, esas que no sienten calor.
Una melodía delicada que desciende cadenciosa desde un cielo plagado de cirrus, de altocúmulos, y el sonido de aves migratorias cortando el silencio que se desliza entre las horas. Silencio hablado, silencio que no es auditivo porque es de otro tipo, el silencio que atrae la paz y que lo reparte en cada elemento, que termina flotando ingrávido, como instantes suspendidos que se van desligando de la tiranía del continuo y los alcanza lo fugaz de la eternidad.
Un regresar, un camino recorrido, ¿a dónde?, a la promesa, un reencuentro con la casa, y el pan, y la luz de la mañana, un salir de la noche y un regresar a la mañana tierna que se desdobla virginalmente en el bosque, en la playa, en el instante en que estas, en las manos que tientan y los labios que tiemblan, un regresar a la edad de oro, la distante y la futuro, la promesa extraviada, lo bendito de lo terrenal, lo humano, un retorno a la humanidad.
Una cabaña y un olor a pino fresco, y las teclas de un piano que se van abriendo entre las copas de los árboles, como se abren tus labios para mostrarme una sonrisa, como se cierran tus ojos cuando el viento los golpea. Una madera que renace y el moho que se vuelve benévolo, desenmarañarse, tiempo de paz, de austeridad, se simplicidad y sencillez, porque solo en la simplicidad se puede estar en paz, que es ser feliz y mucho más.
Eran las doce o una de la mañana, aún recuerdo el sonido estrepitoso del viento, mientras la lluvia golpeaba en mi ventana, no recuerdo desde que horas estaba ahí; mis pensamientos bruscamente desordenados, por un lado mis sentimientos, por el otro mis ocupaciones, el trabajo, la escuela, el gasto (cuanto puede tener una mujer en mente y no demostrarlo ante la gente; pero nadie sabe de las horas de insomnio que debe padecer).
Entre tanto que pensar me llego a la mente la curiosa idea de aunque sea por un instante estar a solas conmigo, a solas con mi persona; apague las luces del andador, donde me encontraba en un cómodo diván, que había en la sala contigua, encendí las velas, inmediatamente el aroma a frutas tropicales se empezó a desprender; deje que se esfumaran mis miedos, que empezaron uno a uno a aparecer delante de mi, y como por inercia a cada cual le hice una cara chistosa, que les aterrorizó más de lo que ellos a mi. Sólo la lluvia y el viento, mi respiración y mis latidos, sólo yo, sin penas ni nada, sólo yo y mi alma; la persiana se abrió, una ráfaga de aire frío se colo por debajo del baton transparente, que utilizaba esa noche, aquel donde se dejaba ver tentativamente mi silueta, pero eso no me detuvo, poco a poco todos los sonidos se empezaron a esfumar, sólo eramos mi respiración, mis latidos y yo, imaginé esa bomba con su sístole y su diastole regalándome la vida que hoy tengo entre mis manos, mi corazón preciosa pieza tan importante en mi existir y de la cual pocas veces o nunca presto atención, pero ahí estaba escuchándole en conjunto con mi respiración, el aire frío que inhalaba, el sonido de mi exhalación; que bien me sentía regresando paulatinamente en el tiempo, de nuevo viví experiencias de las cuales ya ni llorar es bueno, como en una película me fui incursionando en mi pasado, cortando aquello que no me gustó y alargando los pensamientos de los ratos buenos. En un segundo estaba ahí, parada junto a mi madre en el porton del preescolar, rogándole que se marchara ya; como se fue mi infancia, que rápido me olvide de mis ideales, como en un instante se pierde la vida, se pierde el amor. Estaba ahí, perdida en estar a solas conmigo, en hablarme, en reprocharme eso que nunca a nadie le pude decir, acto seguido, empece a recorrerme cada centímetro de mi piel, como jamás lo había experimentado, me sentí tan única, que no tenia el deseo de perderme de mi otra vez. Poco a poco, aun sin querer regrese, me reincorporé, no sé si alcance el nirvana, porque el placer que sentí nunca antes lo había experimentado así, estaba sudando, las piernas tembelecosas, a penas si querian responder y al abrir totalmente mis ojos me encontré gritando estruendosamente como al final de un orgasmo excepcional.
Era otra distinta, con una enorme sonrisa en el rostro, que aun no me he podido quitar, con ganas de gritarle al mundo, que este amor que por él yo siento, no lo puede opacar ni la sombra de lo que antes creía amor de verdad; las tragedias, los miedos se esfumaron en cuanto pude estar de nuevo y a solas con mi persona, en cuanto pude ver que tan valiosa soy para mi, y en cuanto alguien pueda dar por amarme tanto como yo a mi.
Cualquier sentimiento de desaprobación a mi, que antes tenía lo deje ir, me amo, quiero que me amen como lo hago, con respeto y prudencia, con locura y elocuencia, quiero que me amen. Y en un abrir y cerrar de ojos supe que ya tengo dueño, que ya hay quien me sepa querer como lo empece a imaginar, como quiero que me quieran, ya hay quien me sepa amar.
Vivimos tiempos díficiles, los
movimientos sociales, son polvorines que explotan con fuerza y a las
pocas semanas se van desgastando rápidamente, si bien esto no es el
caso de todos los movimientos, la mayoría de las fuerzas renovadoras
que estallan con fuerza en México, se apagan rápidamente en el
mejor de los casos en cuestión de meses. Paralelamente, los
movimientos se han pacíficado al tiempo que la palabra “ciudadano”
comienza a ser moneda de cambio entre todos ellos. ¿Qué les falta a
los movimientos para progresar?, pareciera que todos recogen un
encono generalizado contra los poderes fácticos, pero al mismo
tiempo carecen de la capacidad de enraízar en una sociedad que los
acoge y al final los rechaza.
Una idea que ha llegado a mi mente
recientemente es la cuestión, sobre si la sociedad está corrompida
en la sustancia o en la Forma. La mayoría de los movimientos
sociales actuales, critícan la Forma de la sociedad mexicana la
desdeñan y la acusan de corrupta. No obstante, estos movimientos no
están excentos de formar parte de la misma sustancia social que los
alimenta, al fin y al cabo “todos somos pueblo”. Si la sustancia
está corrupta, nada puede crecer en el sustrato, nada puede
arraigarse sino a través de la Forma que lo represente. Así los
movimientos sociales, o se desgastan rápidamente o se convierten en
instituciones que absorben en la Forma su causa, la Forma se
convierte en la causa y no en la consecuencia de lo que querían
realizar.
Pero, ¿qué está dañado en el tejido
social?. Uno podría enumerar una serie de posibles factores que
causan esa corrupción de la sustancia social, pero desde mi análisis
muy superficial, todo se puede reducir desde sus expresiones a el
virus causal de la infección: el individualismo. Nuestro sistema
capitalista es un sistema predominantemente individualista, debo
subrayar que no pretendo elevar una crítica al sistema, aunque
inherentemente pudiera serlo, sólo trato de plasmar ciertas ideas
que considero prudentes expresar; luego se basa en la exaltación del
individuo sobre la comunidad, este sistema en el que estamos
insertados y la política económica actual, el neoliberalismo, han
llevado al individuo hasta sus últimas consecuencias. Las bondades
de la reinvidicación del invididuo frente a la sociedad, son varias,
can desde un mayor acceso del individuo a mostrarse en sociedad tal y
como es, hasta el surgimiento entero de nuevas comunidades, y la
presión social sobre el grueso poblacional para aceptar tales
derechos, el individuo es ahora una pieza importante y no sólo un
esclavo de la masa, al individuo se le dió libertad para decidir y
actuar. Podría sonar paradójico el hecho que la “privatización”
del ser haya fomentado el nacimiento de nuevas comunidades, pero es
que en el fondo, el ser humano es un ser social, el individuo nunca
podrá hacer nada por sí sólo, si no pertenece a una comunidad
donde pueda recrearse. La persona fue liberada de la moral social, y
dejada a la interperie, de esta manera puede buscarse a si misma,
porque el sistema le dió esa posibilidad, sin embargo, su fatalidad
es siempre pertenecer a una comunidad.
Como vemos, incluso en el tantas veces
pintado como cruel y desgarrador (que lo es) Sistema Capitalista,
existen beneficios que quizá en regimenes fundados en otros términos
hubiesen fracasado.
Sin embargo, debido a que el sistema
depende del consumo continuo y exagerado de los bienes producidos,
aún cuando son innecesarios para la persona, el individualismo se
acentuó al grado de despojar al ser humano de su caracter social,
negando esta parte estructural del hombre, no sólo se mutila al ser
sino que se inserta una crisis social, sutil, pero profunda.
El sistema se dedicó entonces a vejar
el sentido social del ser humano, la propiedad privada, pudo inciar
como una conquista, pero se convirtió rápidamente en una afrenta a
la propiedad comunal, mientras el valor de la propiedad privada
crecía, la propiedad comunal se desmoronaba, y al ser un sistema
basado en el valor de las cosas, la comunidad en seguida perdió
protagonismo. Se nos educó para la competitividad agresiva y no
asertiva, los valores inherentes a y que habían permanecido grabados
en nuestra consciencia fueron en el mejor de los casos anestesiados,
para poder hacer crecer el naciente sistema. El capitalismo al igual
que el stalinismo y los socialismos autoritarios cayeron en el error
de llevar las cosas a los extremos, causando la muerte de alguna
parte esencial del hombre y en el proceso poniendo en entredicho la
condición humana de los subyugados.
Regresando a la actualidad, con un
individualismo profundo y avasallador, nos encontramos abandonados,
incapaces de tender puentes que no representen una ventaja
competitiva, hemos perdido el sentido de la comunidad, de frente a la
historia de la Rusia comunista, y de Europa del Este, hemos aprendido
a identificar el retorno a la comunidad como el camino al socialismo
o algo peor. Es ahí donde creo que está el problema de fondo de
nuestro México, no se puede hablar de una reconstrucción del tejido
social, mientras el germen de miedo a lo comunitario continue. Peor
aún, más allá de un miedo al totalitarismo, que es infundado, se
mantiene también un desprecio a la comunidad. Tal vez, lo segundo se
deba a que lo comunitario no representa el progreso, creemos de
manera muy equivocada, que la comunidad fue la forma primitiva de la
esixtencia humana, algo a lo que no queremos o que simplemente no se
puede regresar. Incluso la religión cristiana no representa un
regreso a la “edad dorada” como creía Octavio Paz, sino más
bien un individualismo satisfactorio, menos agresivo, después de
todo una religión basada en la salvación individual, no podría
ofrecer una vida eterna comunal.
El país, y los movimientos sociales,
necesitan un cambio, un vuelvo de la Forma a la sustancia para
reconstruir efectivamente el tejido social, el Estado podrá
encargarse de sembrar espacios públicos, poner parques recreativos,
y centros comunitarios, pero sin un sentido de comunidad ese esfuerzo
será una mera máscarada, que terminara como la mayoría de los
programas sociales actuales, en estrepitosos fracasos. Continuidad e
integración son los factores decisivos en la reconstrucción de la
imagen de la comunidad, ya hemos logrado la deidificación del
individuo, excesiva y voraz, ahora pongamoslo en contacto con los
otros dioses que habitan su mundo, demostremonos y demostremoles, que
más que dioses, somos hombres, y animales y contemporáneos a un
tiempo y a un sentir, insertados en un devenir constante.
El retorno a la comunidad es un retorno
necesario, pero más que como un retorno debe ser un avance, una
puesta de acuerdo. Ciertamente esto no hará que los movimientos
sociales cesen, quizás ni siquiera en su explosividad, pero al
tiempo que se vuelcan sobre la sociedad, dejarán de encerrarse en
discos donde acaben por asfixiarse. Hay que destruir la imagen de la
comunidad antigua y bárbara y la imagen de una comunidad roja y
radical que asfixie al individuo, la comunidad no es la pérdida de
las libertades ganadas por el hombre en solitario, sino la suma de
las coincidencias para lograr fines más complejos. El trabajo no
tiene valor si no está insertado en la comunidad, asimismo un
individuo es intrascendente cuando rechaza esa parte que es inherente
a él, la comunidad. Reacios a aceptarlo tendemos a aislarnos,
siempre vamos a estar sólos, somos seres contingentes incapaces de
violar nuestro cuerpo físico, pero podemos recrearnos en nuestros
semejantes.
Piensa en mí, pero yo, ya no más en ti; piensa en mi, materializada cuando escuchas mi voz en el auricular de un frio celular, piensa en mi, mientras le quitas el vestido, y estoy más que segura que diras mi nombre al besar su ombligo, piensa en mi cuando recorra tu clavicula con la yema de sus dedos, cuando te diga perdiendose en tus ojos mil y una mentira, piensa en mí, cuando cansada de tanto escucharte hablar de mí, piense en marcharse de tu lado.
Sé que videntemente no has dejado de extrañarme porque aunque lo digas, es inevitable enterarse de que para ti, yo soy insuperable.
Y pensaras en mi, cuando digas que te has cansado de amarme, y más aún pensaras en mí cuando busques la felicidad que a mi lado llevabas y no la puedas encontrar por que la he enganchado al dedo de alguien más. Y entonces veras que cuantas veces pensabas en mí, pensando que yo pensaba en tí, te habías equivocado, porque la realidad apunta a que yo pensaba en alguien más, en un ser que se vuelve a mi felicidad, en alguien que rompe paradigmas que me ama muy a pesar del que diran; entonces arrepentido vendras a ofuzcar mi felicidad, que riendo hacer que piense en ti, pero "no chquitito", ese tiempo ya paso, y pensando que yo pensaria en ti para toda la eternidad, te volviste a pensar en tu vanidad, en tu avaricia, en los besos de alguien más.
Y no sé si seguiras pensando en mi, o como yo, te dirigiras a buscar un motivo para ser feliz, o a la pieza rota de un rompecabezas donde puedas embonar (y sabes a lo que me refierpo, donde tu daño puedas reparar)
Ella sólo pensaba en el otro por las noches, cuando al calor de las copas, su egoísmo se esfumaba y tomaba decisiones salomónicas. Ella sólo decía la verdad por las noches, cuando miraba a la luna y le venían de quién sabe dónde, ataques de sinceridad. Ella sólo besaba por las noches, y sus ojos se iluminaban, porque a diferencia de lo que sucedía en el día, amaba verdaderamente a un hombre.
Al tercer intento de iniciar una conversación decidí que con ella no había futuro, conclusión que confirmaría un par de segundos después cuando dejó su vaso de Cuba Libre sobre la barra y casi como en suspiro anotó "Sólo quiero sentirme bien". ¿Bien?, bueno, bien es una palabra curiosa, depende de lo que uno quiera definir como bien o como mal, pensé. ¿Bien?, alcancé a responderle mientras mi cerveza tocaba mis labios. "Sólo bien, placentera", y me devolvió una mirada encendida que se apago al desbocarse sobre un vaso más allá de mi hombro izquierdo. ¿Tu nombre? pregunté levantando levemente la ceja izquierda. ¿Realmente importa? y recogió su mirada para estrellarla contra mis ojos, cruzó las piernas y se inclinó sobre la barra. ¿Fuego? miró con un mechón de cabello resbalando por su oreja izquierda y sus labios rojos dibujando una "o". Lo siento, ya no fumo. Lástima, con lo bueno que es el sabor de la nicotina después de haber tenido sexo. ¿Sexo?. A menos que te niegues, ¿te negarás? y dejó caer su mano delicadamente sobre mi rodilla. Le devolví una sonrisa estúpidamente tímida y dejé mi copa sobre una servilleta usada, saqué mi cartera y dejé nuestras cuentas pagadas. Salimos del brazo, ella se caló su sombrero con una pluma de pavo real y su breve chaqueta de cuero, yo apenas alcancé a ponerme la chamarra que traía del trabajo. La noche era fría y la madrugada había comenzado a cobrar sus victimas entre las aceras. Un aroma rancio cubría las calles próximas a su edificio, subimos despacio, sin mirarnos y sin cruzar palabra. Al llegar a su departamento sobraron los eufemismos vertidos sobre ese instante que se alarga, con el único propósito de prolongar el goce carnal de los cuerpos abandonados en la oscuridad y soledad de las almas que los habitan. Ella no paraba de repetir "sólo quiero sentirme bien" mientras su voz desfallecía en olas invisibles y periódicas, que yo procuraba remontar al vuelo. Sus cabellos se me escapaban en formas invisibles y sedosas, y la luna se filtraba en pequeños cristales ahumados.
No me volverás a ver. ¿Tu nombre?. Nocturna, soledad, ¿mujer fatal?, ¿cuál te gusta?, para eso siempre has sido bueno. ¿Me conoces? . Digamos que te conocí, con diez años menos. No me importa quién seas, estas aquí. Hoy no estarás sólo, hasta que den las cinco y diez. Hoy no estaré sólo...esta noche estas aquí, quien quiera que seas. A lo lejos un niño lloraba, y un tren solitario mugía entre los escombros de la ciudad.
Tengo un gato de mascota. Pero, ¿realmente uno puede tener un gato de mascota?. En la Convención Internacional de Amantes de los Gatos celebrada en París en el año de 1963, una feminista dijo: "los gatos, como todo animal, son almas libres, que no están sujetos al cariño humano, que pueden decidir por ellos mismos". Así que, desde su perspectiva un tanto metafísica, la verdad no estoy muy enterado, uno no puede apropiarse del alma del gato, entonces uno no puede poseer al gato...entonces, ¿el gato lo posee a uno?. Sarah una bruja del estado de Texas, sostiene que es posible, y esto se debe a la manera tan especial de los ojos de estos felinos. Existen tantas opiniones sobre la posesión real o ficticia de un gato como mascota, que es posible escribir algún ensayo titulado "Historia de la Relación entre el Ser-Gato y la Nada-Gatuna".
Realmente me preocupa mi posición filosófica y moral respecto al animal que veo de vez en cuando parado en la cocina, o asomándose por el balcón exigiendo un poco de jamón para comer y algo de leche. Pero, quizás me preocupa más la posición del gato. Por poner un ejemplo bastante práctico, hace un par de días me encontraba discutiendo un problema de Geometría con su lomo y decidió morderme, creo que no le gustan mucho las demostraciones y ese es un punto muerto en nuestra relación.
Nuestra relación también es un problema, me siento usado, tal vez la vieja bruja de Texas tenga razón, o tal vez sólo estoy demasiado solo. El gato, negro como la noche y de ojos color amarillo tiene un pequeño collar atado a su cuello con un cascabel que anuncia que ha llegado. Creo que es categóricamente imposible que él se lo haya puesto como una vanidad de bisutería, así que supongo que tiene "otros" dueños. No me importa mantener una relación abierta con un animal, puesto que de todas maneras no tengo el tiempo suficiente para tratarlo en una relación formal de mascota y además, estoy impedido por cuestiones maritales a hacerlo.
Al final de mi disertación, espero que la sociedad no me juzgue, por no decidirme entre una mascota, o algo que no se definir, es un buen gato, nos caemos bien, yo lo acaricio, el come jamón de la palma de mi mano, creo que vamos bien, al menos mejor, de lo que voy con mi esposa.
Hubiera sido mejor decir adiós esa noche. Ya estaba haciéndome la idea de no volver a pensarte, cuando volviste a removerlo todo y por medio de dos sujetos enormes, me convenciste de no olvidarte, de darte un espacio en mi corazón, para alimentarlo con esperanza e ilusión. Ya estaba muerto y sin embargo, decidiste revivirme por unos minutos, para volver a hacerme sufrir. ¿Cómo entonces, pensar que me quieres? Los días recorridos, me han enseñado a reconocer las injusticias, sobretodo cuando son en contra del otro. Pero estaba ciego al no ver mi propia injusticia. Acertaste cuando me dijiste imbécil; tienes la razón porque de nueva cuenta, a pesar de todo, creí en ti.
La confusión es síntoma de desconfianza, de no convencimiento, de no querer arriesgar e intentar algo nuevo. Lo sabía y aún así, decidí jugar tú juego. Debí despedirme, debí dejarte ir. Ahora, todo otra vez está de cabeza pues la ilusión me duró unos instantes y se fue por la borda en un abrir y cerrar los ojos.
Soy consciente que después de toda tempestad, viene la calma. Pronto, todo se irá acomodando y te olvidaré. Lo que aún no logró comprender es ¿Por qué tocaste lo más sagrado, mi militancia? ¿Por qué apareciste en los momentos históricos que más anhelaba? Me jodiste la vida. Estoy casi seguro que esta vez es la última, ya no volveré a caer, estoy dispuesto a desterrarte de mi ser.
Ya no más tú.
Porque como bien decía Julio Cortázar: "Un puente no se sostiene de un solo lado...”.
Lo que hemos aprendido duramente es que al haber sido abandonado a la propia compañía, sin nadie con quien contar para que nos acaricie, nos consuele y nos dé una mano, es atemorizante y espantoso, pero que nunca nadie se siente más solo, y abandonado que cuando lucha por asegurarse de que realmente hay alguien con quien pueda contar hoy y pasado mañana para que haga todo eso en el caso en el caso de que la rueda fortuna gire en sentido adverso. los resultados de esa lucha son impredecibles, y la lucha misma tiene su precio. Exige diario sacrificios. No pasa un sólo día sin una escaramuza o un enfrentamiento. Esperar hasta que la bondad oculta (como usted desea fervientemente y, por lo tanto, cree apasionadamente) en lo profundo de su pareja elegida se abra paso a través de la maligna coraza y se revele puede llevar mucho más tiempo que el que usted puede soportar. Y mientras espera hay mucho dolor, lágrimas vertidas y sangre derramada...
Zygmunt Bauman
Lo que un día fué, no será by José José on Grooveshark
Evito hasta lo posible la publicación de cualquier otro
escrito (al menos de mi parte) que esté fuera de lo que para mi significa este
blog, me refiero, por supuesto, a un blog de miradas (pseudo) literarias. Sin
embargo, a veces, uno siente la necesidad de explicar su opinión y termina
cediendo a ese impulso de ofrecer un punto de vista.
En general, me he abstenido, no sin problemas personales, a
hablar del movimiento estudiantil que ha unificado a los estudiantes
universitarios, mientras en el otro lado obliga al duopolio televisivo a tomar
posturas que de lejos, se miran incómodas. Hoy, no vengo a hablar de los
inicios del movimiento YoSoy132 (eso ya ha sido muy comentado), ni tampoco a
criticar las posturas diversas que ha adoptado el movimiento, no obstante,
quiero hacer un par de anotaciones.
Primero, el movimiento se ha
declarado en semanas pasadas como un movimiento apartidista y Anti-Peña
Nieto. Hoy me encontraba platicando con una amiga, cuando ella soltó su
mirada “yo, sólo estoy esperando que se declaren pro-AMLO”. Es cierto que el
sentimiento Anti-Peña Nieto, es un común denominador no sólo entre Obradoristas,
sino también de muchos PANistas, el movimiento, aunque se declare apartidista
lleva en su ADN dos propuestas políticas enfrentadas pero a la vez unidas en su
repudio a un candidato. Ahora, es necesario dilucidar la razón de ese repudio.
Desde mi perspectiva, los dirigentes del movimiento han hecho bien en declarar,
que el movimiento es Anti-Peña Nieto, no porque estemos en contra del candidato
en sí, sino por lo que él representa, y creo yo que más allá de representar el
regreso del PRI al poder, lo que francamente, en una democracia ideal no sería
problema alguno, aunque ya sabemos que no es el caso de México; representa la
imposición de un candidato por las Televisoras. Comentaba yo con la misma amiga
durante el desarrollo de la marcha del mes de Mayo por las calles de Mérida: “La consigna
contra Peña Nieto, debe ir más allá de
Peña Nieto, porque mientras las Televisoras sigan teniendo el control absoluto,
seguiremos teniendo Peña Nietos”, lo que quiero decir es que el problema de
facto hoy, es Peña Nieto, pero él no es el problema de fondo, el problema de
fondo es el aparato televisivo estancado y monolítico que ejerce un control
sutil (a veces no tanto) y poderoso sobre la mente del televidente.
Respecto al otro punto de mi
compañera, el de la declaración pro-AMLO, es algo que me preocupa, estar en
contra de algo, no significa estar a favor de lo opuesto, sin duda la
neutralidad política, sobre todo de una masa, es algo prácticamente utópico,
pero que debe estar siempre presente. Al menos en el caso de Mérida, para bien
o para mal, los convocantes y oradores que se han escuchado en las marchas del
movimiento son en su mayoría personajes conocidos por su apoyo a López Obrador,
afortunadamente el grueso del contingente, está compuesto por una mezcla
heterogénea de estudiantes, de diferentes Universidades. El patrón puede repetirse
a lo largo de las diferentes plazas del país, y es que es en la masa, donde
está el movimiento, en los estudiantes que salen a las calles, y no en los
oradores, mientras el movimiento permanezca horizontal, los oradores seguirán
siendo ciudadanos con preferencias políticas diversas, pero en el momento en
que los convocantes pasen a ser dirigentes, podríamos experimentar un cisma. La
horizontalidad es la clave para evitar la partidización de YoSoy132 y para
mantener a raya las preferencias políticas particulares.
Creo yo, que los problemas de
partidización, se resolverían fácilmente, si en vez de atacar directamente la
figura de Peña, atacáramos al aparato que lo sostiene, me refiero por supuesto
a Televisa y Azteca. Mi enojo más que contra Peña, que no responde a un enojo
ciudadano, sino a un enojo político y personal, es contra este monopolio de la
información que tanto daño hace al país. Creo que debemos ir más allá de Peña,
hacia sus bases.
Lo segundo que considero
importante es que el movimiento pase de las calles y avenidas, a las colonias,
es decir, que pase de ser un acusador, a una fuerza de cambio. Para mí, la
política está corrupta, por ello es necesario salir y gritarles sus verdades,
exigirles a los monopolios, obligarlos a cambiar, hacernos presentes. Sin
embargo, el salir a las calles, cada tantos días no va a tener un impacto real
en la cotidianeidad de una sociedad conformista como la que habitamos. No estoy
diciendo que debemos de abandonar la lucha desde la protesta, sino que la
extendamos a algo que no sólo sea de un par de horas, yo abogo por la creación
de brigadas de culturización e información. La cultura más allá de la
información, es nuestra principal arma, un pueblo culturizado es bastante capaz
de seleccionar y contrastar la información, somos estudiantes, somos bastante
capaces de encender una computadora y navegar por internet tranquilamente en el
peor de los casos, entonces, ¿Porqué quedarnos aislados con todo ese
conocimiento?. Mi propuesta es lanzarnos a las calles en grupos de ocho, cinco,
diez personas a informar, a contrastar información, a dar el acceso a la
cultura que muchas veces es negado al grueso de la población, a esos que sólo
tienen acceso a periódicos amarillistas y Televisa. A ellos que han perdido la
esperanza en la democracia y que se han olvidado, que el pueblo tiene poder,
que el voto decide, que todos debemos votar. De veras deseo que esto último se
haga realidad, pasar de las calles con gritos, a las colonias con libros, es un
giro necesario y de gran provecho para la sociedad, nosotros los estudiantes,
tenemos no sólo la oportunidad, sino la obligación de hacerlo, porque en un
país con políticos títeres, y debates estériles, los estudiantes, y todos los
que se identifiquen con YoSoy132 somos los que podemos salir, y demostrar que
los 131+(n+1) no somos porros ni acarreados ni políticos, somos ciudadanos,
realmente preocupados por nuestra realidad social, por México.
Fue tu aliento combinándose con el mio, fueron tus labios en conjunción a los míos, fuiste tú, fue tu aroma, tal vez usabas el "AMOR & PSIQUE"
Fueron, son y seguirán siendo tus detalles para enamorarme los que me mantienen despierta, viva, aun cuando no sostenga tu mano en la manera en la que lo pides, aun cuando de repente me quedo perdida entre los escalones de alguna vieja canción, aún así sigo viva, porque tu me has hecho renacer cual majestuosa ave fenix de entre las cenizas.
Enamorada de ti, de tus besos, de tus manos, enamorada con ese amor juvenil que pocas veces nos llegan para hacernos perder en los múltiples colores del arco iris escondido en los corazones de los dos, enamorada de quien eres y de cuanto bello y majestuoso en tu interior tu posees, enamorada de tu aroma, de tu esencia, enamorada de ti.
Buscar el sabor del placer en los aromas inimaginables, perderse en esa gama aromática que va desde un toque suave y mágico, como a talquito, lo describiría yo, hasta aquellos aromas seductores y varoniles que terminan en un toque de madera o pino seco, ese aroma añejo que te inspira las narices en cuanto que aquel simpático caballero pasa junto a ti; ese era el exquisito vicio que me enseñaste y que aprendí a disfrutar entre tus brazos poderosos al son de unos besos bien melosos y abrazos calurosos (en esta época del verano el calor es insoportable, pero no tanto como para estar entre tus brazos).
Y de repente un día me confundió tu aroma a talquito, volví el rostro, pues ese era el único aroma que en ese tiempo distinguía, el peculiar aroma de mi abuelo los domingos por la tarde antes de ir a Misa; pero no, eras tu, alguien distinto con una mirada penetrante que se clavaba en lo más profundo de mi ser, eras tú vistiendo ese peculiar atuendo de los alumnos de la facultad de medicina humana, ese rostro, esos labios después de aquella primera vez no los pude jamas volver a sacar de mis pensamientos, tu mirada me seguía en todas partes a donde iba, el recuerdo de tu aroma iba impregnado en mi olfato.
Irremediablemente me embrujaste con tus ojos de gato a medio dormir y tu aroma seductor que nadie más a cien mil kilómetros a la redonda puede usar; eres simplemente tú, tan único y especial, el que me hace suspirar, el que cambio mis noches de angustia, prnizor noches mágicas eternizando sueños que al correr de los días se van volviendo realidad.
>Te amo, discúlpame pero no puedo contenerme más este sentimiento tan inoportuno que vino a romper cerrojos y a correr a inquilinos tan tenebrosos.
>Te amo, yo también de la misma forma en que tu lo haces, tal vez más allá de lo que todos pueden pensar.
Esa noche entre mimoseos y frases perdidas llegamos a amarnos hasta la intimidad, esa donde no hay terror de mirar lo que hay en el fondo, o debajo de las ropas.
Esa noche empece a amar un niño con cuerpo de hombre, a un fanático empedernido de los más exquisitos aromas, que deslumbra mi olfato, con las fragancias mas exquisiestas, una para cada día.
Hoy te amo, mañana no sé, pero si Dios y el tiempo así lo quieren nos
casaremos en París en alguna prestigiada tienda de fragancias, donde no me sea imposible volver a recordar a mi querido abuelo.
Para la ausencia de tus caricias en mis labios, no hay nada ya que pueda hacer. Para la ausencia de tus labios mojados, asustados, trémulos, susurrantes, esta soledad me presenta la forma del olvido, del olvido de las texturas, las sensaciones, los colores y los sabores, los lugares y los tiempos, con el tiempo, terminan convirtiéndose en borrones en acuarela de paraísos distantes. Cada vez más lejos de Dios, cada vez más lejos de ti, el recuerdo se va aullando por las aceras de la desolación y clama con voz melancólica el regreso de ayeres con soles naranjas en el poniente y lámparas opacas en el amanecer. Ya no nos quedan más que los fragmentos de papeles, de promesas y de días, que se resumen en horas, de instantes eternos que se cumplen cada vez que se invocan. "Recordar, es poseer", es la posesión absoluta, la máxima posesión, porque sólo a través del recuerdo uno se apodera de las cosas y sobre todo de las personas, yo no dije eso, alguien antes que yo ya lo había predicho y durante mucho tiempo no lo entendí, un día te perdí, y con el tiempo, aprendí que cuando te recordaba eras más mía que antes, porque ya no eras otra, sino que eras yo, como alguna vez te dije que lo eras. Recordarte, es poseerte, no como objeto, sino como tú, como lo que fuiste, y que probablemente no vuelvas a ser jamás.
Las ausencias hacen aritmética básica y cruel contra el corazón, y yo amor, metido en estas ciencias exactas, no puedo más que ocuparme en verificar que los resultados sean correctos...ya no me queda mucho, pero me queda algo, algo contigo.
Compartimos el Libro: "De la dictadura a la Democracia" del autor Gene Sharp, en su formato audiolibro para nuestros estimados lectores. Un título imprescindible sobre los diferentes métodos que el autor propone para disolver dictaduras por medio de revoluciones pacíficas y acciones no-violentas. (son díez capítulos que se estarán subiendo hasta completar la carpeta):