viernes, 28 de septiembre de 2012

Fin de fiesta


Tus ojos ya no brillan como antes. La tristeza es una constante cuando estamos cercanos. Los días transcurren y sólo apareces deslumbrante en mis sueños, diciéndome algo sincero, siendo franca conmigo. Luego despierto y descubro que la realidad es otra, tú ya has desaparecido de mi vida. 

Qué triste es todo ahora sin ti. Me duele verte tan gris, tan lejana de todo. Quisiera decirte tantas cosas, pero el silencio entre los dos es ya irreconciliable. Quisiera encontrarme contigo en un futuro lejano, como cuando dijimos que nos casaríamos a los cuarenta, y seríamos los más felices del mundo. 

Quizá eso nunca más vuelva a suceder. Lo cierto es:

Se nos acabó el amor...


Fin de fiesta by Kevin Johansen on Grooveshark

martes, 18 de septiembre de 2012

La espera de Octavio



-¡¡¡Octavio!!!- Gritó con firmeza la joven madre

-¡Ya voy mamá!, aún no ha caído la tarde y puede ser que papá llegue en el último tren- Contestó con alegría el pequeño mientras seguía parado en el montón de arena que le daba vista a la estación del tren

-¡¡¡Octavio!!!, que vengas aquí pequeño desobediente, que la merienda ya esta servida y debes lavarte los dientes, la tarde ya cayó, no quiero que sigas ahí, vente, te debes bañar

-Pero mamá...

-Es la última vez que te hablo Octavio

Octavio bajo del cerro de arena, entró en la choza y corrió directo hacia el baño, en la cama ya estaba preparada la vieja pijama de cochecitos rojos y los calcetines verdes que tanto le gustaban; en la mesa esperándole se hallaban una taza de espumosa leche y una pieza de pan recién horneada. Al terminar de arreglarse Octavio fue hacia la mesa donde tomó su respectivo lugar y empezó a merendar, Maura, su madre le miraba tiernamente, sus ojos vivarachos y aquellos rizos dorados que a veces le cegaban la mirada, ese era Octavio, el hijo que tanto amaba, aunque quizás eso se debía a que era el único.

-¿Mamá?-Dijo con voz muy queda Octavio

-¿Qué paso hijito?

-Mañana después de mis deberes también saldré a esperar a papá

-Mi amor, creo que debemos dejar esa espera, tal vez el ya no vuelva

-Pero mamá, tu me dijiste que un día iba a regresar, y yo lo voy a esperar- Refutó y advirtió Octavio a su madre

-Octavio, ya son 7 años que llevo yo en su espera

-¡Vamos mami! ¿no me digas que ya te cansaste?, mira cuando papá halla regresado, cuando lo veas entrar conmigo en los brazos veras que si ha servido esperarlo

-Hijo, cada tarde desde que él se marchó lo he esperado en este mismo sitio

-Mamá, yo sé que papá va a volver, el tiene que venir, es que yo sé que el va a venir; una vez Simón, el hijo de doña Soledad me dijo que el espero por mucho tiempo a que llegara el paquete de libros que había mandado a pedir a la capital,  y que no se canso de hacerlo, porque esperaba con ansiedad esos libros, así yo tampoco me voy a cansar por que anhelo con todo mi corazón conocerlo- Las lagrimas en los ojos de Maura se hicieron visibles, el pequeño corrió por un pañuelo y secó las lagrimas de su madre.

-Octavio, posiblemente tu padre no vuelva jamás, sin embargo me uniré a tu deseo ferviente, y esperaremos su regreso, aun cuando mi corazón se halla cansado de esperar, porque todo cuanto tengo eres tú, y si un día el brillo de tu mirada se apaga, empezaré a desvanecerme también, porque todas cuantas ilusiones me forjé ahora se han concentrado en ti. Esperaremos juntos a que vuelva aquel señor, si un día también te cansas de esperar, ese día hijo mio tu y yo empezaremos a volar más alto, tanto que ya nadie nos esperara jamás.

El pequeño besó la frente de su madre y se metió a la cama, Maura simplemente le daba mil vuelta a aquel deseo que se miraba tan fantasioso y que sin embargo no se podía cortar, cerró los ojos y empezó de nuevo la historia a soñar, recordando cada beso, cada abrazo, recordando todo cuanto a su hijo había enseñado, y el día en que por vez primera lo incitó a esperarlo...

lunes, 17 de septiembre de 2012

Mi gin tonic


Para ver bailar voy a un club
mientras muerdo el limón
de un gin tonic usado... en tu cadera,
no me digas que voy a tener que ir
a ver a tu grupo del siglo pasado,
en la bombonera.

Hay días para quedarse a mirar,
hay días en que hay poco para ver,
hay días sospechosamente Light,
hay un deseo que pido siempre que pasa un tren.
Para ver bailar voy a un club mientras muerdo el limón

de un gin tonic usado... en tu cadera,
todo bien porque voy a comer como un rey
en tu agencia de coches usados … entre colegas.
Hay días para quedarse a mirar,
hay días en que hay poco para ver,
hay días sospechosamente Light,
hay un deseo que pido siempre que pasa un tren.
También hay un deseo que pido siempre, que pasa un tren.
Hay un deseo que pido siempre, que pasa un tren.

Andrés Calamaro

Mi Gin Tonic by Andres Calamaro on Grooveshark



martes, 11 de septiembre de 2012



No me ames a la fuerza, no lo hagas si no sabes en realidad todo cuanto puedes causar.

No obligues a tus labios dulces decir lo que mis necios oídos en ocasiones quiere oír, ya no trates de engañarme, lo supe todo en cuanto desaparecieron los detalles, en cuanto tu mirada se perdía en el horizonte callando aquellas palabras matadoras que según tu irritarían mi alma.

No pienses que me vas a lastimar, lo poco que queda de mi ya no se puede fracturar, ¿las ilusiones? no se pueden esfumar pues ya se habían ido algún tiempo atrás; no te preocupes por mi desde hace tanto tiempo que me he vuelto dura como una roca, y en mis locos momentos de dulzura era porque intentaba volver a ser la que antes fui, sin embargo el truco no funciona así, entre más amo, menos amor he de recibir, entre más digo tus labios callan, entre más lloro tus sonrisas son evidentes, entre más fiel y leal te soy tus miradas se fugan con la chica risueña, con la mujer amena, pero conmigo jamás, entre tanto amor, esto se empezó a apagar, no sé tu pero yo he empezado a temer un patético final...


martes, 4 de septiembre de 2012

Nostalgias


Quiero emborrachar mi corazón 
para olvidar un loco amor 
que mas que amor es un sufrir... 
Y aqui vengo para eso, 
a borrar antiguos besos 
en los besos de otras bocas. 
Si su amor fue flor de un día, 
por que causa es siempre mia 
esta cruel preocupacion. 
Quiero, por los dos, mi copa alzar 
para olvidar mi obstinación, 
y mas la vuelvo a recordar. 
Nostalgias 
de escuchar su risa loca 
y sentir junto a mi boca 
como un fuego su respiración... 
Angustias 
de sentirme abandonado 
y sentir que otro a su lado 
pronto, pronto le hablara de amor... 
Hermano, 
yo no quiero rebajarme 
ni pedirle ni rogarle 
ni decirle que no puedo mas vivir. 
Desde mi triste soledad 
vere caer las rosas muertas 
de mi juventud. 
Gime, bandoneon, tu tango gris 
quizas a ti te hiera igual 
algun amor sentimental... 
Llora mi alma de fantoche 
sola y triste en esta noche, 
noche negra y sin estrellas. 
Si las copas traen consuelo, 
aqui estoy con mi desvelo 
para ahogarlo de una vez. 
Quiero emborrachar al corazón 
para despues poder brindar 
por los fracasos del amor

 Enrique Cadicamo


Nostalgias by Andrés Calamaro on Grooveshark

Audiolibro Recomendado del Mes

Compartimos el Libro: "De la dictadura a la Democracia" del autor Gene Sharp, en su formato audiolibro para nuestros estimados lectores. Un título imprescindible sobre los diferentes métodos que el autor propone para disolver dictaduras por medio de revoluciones pacíficas y acciones no-violentas. (son díez capítulos que se estarán subiendo hasta completar la carpeta):